Convertir algas marinas muertas en un producto en polvo para la alimentación animal es un excelente ejemplo de sostenibilidad integral. Moliendo, mezclando y secando estas algas se obtiene un alga calcinada completamente natural, que contiene gran cantidad de minerales diferentes. Esta alga calcinada está enriquecida con óxido de magnesio y es adecuada como alimento orgánico en polvo para el ganado. El producto resultante actúa como tampón ácido, regulando la acidez del estómago de las vacas para facilitar la digestión y – además de sus beneficios para la salud – también reduce la producción de metano.
Un requisito importante del proceso de mezcla de algas marinas calcinadas y óxido de magnesio es reducir al mínimo la cantidad de polvo que produce el producto final en polvo, ya que esto causará problemas a los ganaderos, con la consiguiente pérdida innecesaria de producto del pienso durante el proceso de dosificación en silos, y también al ganado, porque el polvo fino puede causar irritación en la nariz/pulmones.